Proveniente de la ciudad de Recife, en Pernambuco Brasil, Amaro Freitas es un compositor y pianista que a sus 32 años, con ocho de trayectoria discográfica y una cuarteta de álbumes publicados, ha llegado a alcanzar un status internacional importantísimo, ha colaborado con leyendas de la música brasileña como Lenine y Milton Nascimento, y es considerado una de las figuras que está renovando el lenguaje del jazz a nivel global, ya sea acompañado del bajista Jean Elton y el baterista Hugo Medeiros como el Amaro Freitas Trio, o completamente por su cuenta, con algunos invitados, como es el caso que en esta ocasión tan especial nos atañe.
Y es que este álbum es de una gran singularidad dentro de su obra por varias razones, comenzando por que es su debut dentro de la discográfica Psychic Hotline, propiedad de Sylvian Esso, que no escatimó ni un poco en su elaboración, fue producido por él junto con sus paisanos Laercio Costa y Vinicius Aquino, quienes grabaron en estudios de Recife, Milán, Los Ángeles y Brooklin, pero más importante, es el primero de sus discos que no está interpretado por el célebre trio, dando un absoluto el protagonismo al piano preparado, y acompañándose en algunos temas por notables figuras del jazz como el percusionista Hamid Drake, el guitarrista Jeff Parker o Shabaka Hutchings en las flautas.
Y’Y, que se pronuncia “eey-eh, eey-eh”, significa “agua” o “rio” en lengua Sateré Mawé, proveniente de Manaus, capital del estado de Amazonas en Brasil, pues el disco fue compuesto a partir de una estancia trascendental para Freitas en dicha región, y se desarrolla en su totalidad como una suite que amalgama todos sus componentes en una sola pieza que si bien tiene su fundamento en el jazz, se acerca fuertemente a la raíz de la tradición afro-brasileña por un lado, y a la clásica contemporánea por el otro, haciéndolas confluir de una manera insospechada, en una personalísima oda a la selva amazónica.