Phil Elverum, es un legendario músico y artista visual proveniente de Washington, que comenzó su carrera discográfica liderando al proyecto The Microphones propuesta que orbitaron diversos músicos y colaboradores y que alcanzaría un reconocimiento importante con la edición del influyente álbum The Glow Pt.2, para un par de años después editar el álbum Mount Eerie, momento a partir del cual daría por finiquitado (temporalmente) The Microphones para continuar por completo en solitario bajo el nombre de dicho álbum. Por esas épocas se casó con la artista canadiense Geneviève Castrée, que lamentablemente falleció en 2016, a quien le dedicó su disco mas célebre, el desgarrador A Crow Looked At Me.

Otro hecho significativo que marcó su carrera cuando hizo la transición entre sus dos bandas emblemáticas, fue la fundación de su propia discográfica P.W. Elverum & Sun, pues aunque en un inicio grabó con K Records, responsable de los primeros trabajos de proyectos como Beck, Modest Mouse o Built To Spill, y siempre gozó de libertad creativa, tener el control absoluto de todas sus grabaciones le ha permitido hacer el disco que quiera por inusual que resulte, y como el graba, produce e interpreta prácticamente todo su material, es claro que su obra es exactamente como el necesita, y este álbum doble de 26 temas y 80 minutos de duración es prueba fehaciente.
Night Palace es un álbum que se aleja del formato convencional que tenían sus últimas producciones, para desplegar una especie de catálogo de exploraciones y tratamientos que Elverum ha ido abordando por casi treinta años de carrera y que abarca una paleta amplísima de soluciones a su característico modelo de composición, que va y viene entre folk de carácter experimental, slacker lo’ fi, slowcore, spocken Word, grabaciones incidentales, algo de remanentes minimalistas y drone, noise y post rock, todo desarrollado en una sola placa, que si bien puede llegar a ser cansada para la audiencia de ocasión, resulta una revisión definitiva en lo que lleva de carrera.